lunes, mayo 28, 2007

Luto

Protesto. Me quejo. Me opongo al cierre de Radio Caracas Televisión. Me parece una de las cosas más tristes que ha pasado en Venezuela. Desde mi punto de vista es perder la libertad de expresión y con ella la democracia. "Darle concesión a la verdad es no renovar la mentira", ese era el slogan del gobierno para cuando partí para Japón.

En una democracia verdadera se respeta la opinión del contrario, más bien se estimula el debate. En el enfrentamiento de ideas es donde está el centro de la democracia, en la pluralidad, en el hecho de que todos tienen los mismos derechos, incluso el derecho a expresar su propio punto de vista.

No hay un punto de vista que sea más correcto que otro, todos somos seres subjetivos y nuestras opiniones siempre son subjetivas. Un gobierno que se cierra a la pluralidad, un gobierno que sólo quiere que hayan voces consonantes con sus dictámenes no puede llamarse a sí mismo democrático. Ahora sólo falta que le cambien de nuevo el nombre a Venezuela a algo como "República democrática …". Por alguna razón, los países que tienen dicho título en su nombre son aquelos de los que más se duda que en verdad sean "gobernados por el pueblo".

Solamente puedo imaginar el estado de zozobra en el que muchos viven cada día en mi país. No vi en vivo el cierre de la señal de RCTV. Sólo pude acompañar a MU por chat, leyendo su narración, que me pareció muy triste:

 "Himno y se apagó…

 negro

 y pusieron TVes"

Tristeza.

Las últimas noticias que tuve es que antes de la media noche hubo protestas en frente de CONATEL, disueltas con bombas lacrimógenas y agua, había planeado un cacerolazo/tocar corneta a las media noche y que había paro de estudiantes en las universidades el día lunes.

No puedo menos que acompañar a los demás venezolanos en un sentimiento de luto. Muy triste.

tves sin libertad de expresión…

lunes, mayo 21, 2007

La Gaveta

Cuando un grupo de personas de variadas cultura convive tiende a suceder que lo que para unos es normal a otros es algo que escapa del sentido común. Ese el principio de lo que se conoce como "Shock Cultural". En la residencia vive gente de todas partes del mundo, sin exagerar: Canadá, E.E.U.U., México, Ecuador, Perú, Brasil, Australia, China, Bangladesh, Tailandia, China, Myanmar, China, Korea, Taiwan, China, Egipto, Italia, Alemania, Suceia, Rusia, Bahrein, China, Jordan, Etiopia, y ya me cansé de contar. Esto da pie a que se generen muchas formas de ser inconvivible para personas de alguna cultura en particular.

Estilos internacionales de crear choques culturales:


  • Estilo Tailandés: Cepillarse los dientes en la ducha, desde afuera de la ducha

  • Estilo Tailandés, parte 2: Cepillarse los dientes en el fregadero de la cocina

  • Estilo Alemán: Al caminar por los oscuros pasillos de las 11:00pm tronar los dedos… es por lo de la ecolocación

  • Estilo Egipcio: ¿Bañarse? Casi nunca, para eso nos lavamos la cabeza, manos y pies en el lavamanos en el que yo más nunca me vuelvo a cepillar los dientes

  • El estilo de mi vecino: Ver programas cómicos cerca de la medianoche y no tener conciencia del volumen de su risa

  • Estilo Tailandés, parte 3: Cocinar con no sé qué ingrediente explosivo que deja toda la urbanización a 100 mts. a la redonda oliendo a dicho vegetal

  • Estilo anglosajón: Andar por la residencia en interiores apretaditos…



  • ¿Qué puede pensar uno de los demás sino que no tienen mucha educación o sentido común? Resulta ser que nosotros los latinos resultamos ser inconvivibles para algunos también… ¿Cómo vas a dejar los platos y ollas del almuerzo "escurriendo" en la cocina? ¿Por qué siempre tienen que hablar gritado?

    Un poco así es la residencia donde vivo, mucha gente internacional conviviendo a punta de tolerancia extrema.



    El nombre de la misma es trivial, hasta en japonés: Ôsaka dai-ichi kokusai kôryû kaikan ni-gôkan. Puedo leer todos esos kanji, pero cuando llegué por primera vez la cosa era diferente. "¿Qué? ¿tantos kanji? ¡Ah! qué bueno que tiene subtítulos en inglés!"



    Afuera hay unas zonas para las bicicletas. Entre ellas se encuentra el "guaca-turbo". Incluye cesta, timbre poco varonil, parrilla, luces con generador, cubre-cadena para poder ir a la universidad sin preocuparme por que se me ensucien los pantalones (agarra consejo Useche), candado incorporado, patas para sostenerse de pie e incluso una mini-placa color naranja. En Japón tienes que registrar tu bicicleta antes de poder utilizarla. Por lo menos no piden licencia para conducirla. Algo malo del guaca-turbo es que solamente cuenta con 3 velocidades, desearía tener más velocidades bajas para las subidas. Acontece que la residencia está en una colina y la universidad está en otra. De modo que, en todo viaje, siempre empiezo de bajadita, con la brisa ondeando mi larga cabellera, y termino pedeleando con esfuerzo y con la lengua por corbata. Terrible.




    El edificio es nuevo, todo es nuevo. Cada persona tiene su propio cuarto (ya luego visitamos el mío) y hay áreas comunes, como el estar con un buen televisor HD (-; Increiblemente, nadie se pelea por el televisor. Alguien pone cualquier cosa y los demás lo ven. Otra cosa curiosa es que todavía pasan animé de los 80s, como Dragon Ball. Siendo ésta la tierra del animé asumí que tendrían tantas series nuevas que no habría espacio en la programación para series de hace más de 20 años. Los comerciales y programas nipones han cambiado, al menos con respecto a lo que uno puede conseguir en youtube. Ahora parecen más recatados, sin tantas explosiones de palabras de colores en la pantalla, pero aun lo usan de vez en cuando.




    Hay una gran cocina en la planta baja y una pequeña por cada piso. Hay microondas, hornito, tostador, hornillas de induccion donde una amiga quemó una sartén nueva porque le puso aceite y se fue, fregaderos y 3 pipotes para distintos tipos de basura (combustible, no combustible y no entendí el tercer pipote).



    Por lo general yo no cocino. No dispongo de mucho tiempo, procuro comer en los comedores de la universidad. Sin embargo, hacer arroz es sencillo, para eso contamos con un arrocera electrónica. Agregas arroz, agua en una cantidad proporcional y la dejas ahí, al rato está listo. Si no lo comes en el momento no importa pues la arrocera sigue trabajando para mantener el arroz caliente. Esto también desato la ira internacional, cómo vas a dejar la arrocera calentando en la cocina, ¡llévala a tu cuarto!



    Quienes sí cocinan son mis amigos latinos. Desde la izquierda: el novio sueco de la peruana, la peruana Ada, la ecuatoriana vegetariana Mª José, el brasileiro Yuri, el mex. Daniel, la guatemalteca divertida Andrea, el guacamayo venezolano, y el ecuatoriano Sebas. ¿ Por qué si tu no cocinas comes con ellos? no lo sé, son muy amables. Como no sé cocinar de verdad hago y que pelo una papa o que lavo una cebolla. Ni siquiera lavo los platos porque ese departamento lo reclamó muy celosamente la tierra Carioca. Lo único que he hecho por ellos fue un skimo (merengada) de fresa que quedó excelente hace unas semanas. Ya no la puedo hacer más porque alguien rompió las aspas la licuadora tratando de triturar no sé que vegetal congelado.



    Todas las noches procuro tomar un saludable jugo de "15 vegetales y 3 frutas" de nuestra propia vending-machine. No puedes vivir en Japón y no tener una en casa.




    La limpieza de la ropa es deber de cada quien. Para eso tenemos las famosas lavadoras y secadoras del sótano que solamente aceptan monedas de ¥ 100. Es caro lavar la ropa: una lavada ¥ 100; 20 minutos de secadora ¥ 100. Por lo general 20 minutos no son suficientes así que por lo general tengo que colocar 2 monedas. Lavar la ropa también requiere de tolerancia. Hay quienes les gusta dejar su ropa en alguna máquina hasta que acuerdan dos dís después y la desocupan. Es molesto que no haya cupo para tu ropa por descuidos ajenos.



    En el segundo piso está mi cuarto. Como todas las puertas de todos los cuartos en el pasillo son iguales decidí decorar el mío con un koi-nobori, un banderín en forma de pez koi que normalmente se iza el 5 de mayo.



    Mi cuarto es una gaveta. Tiene una superficie de 8.1 mts², pero hago lo posible para mantenerlo ordenado y de esa forma no tener muchos conflictos con el espacio. Si se preguntan porqué la puerta no esá del todo abierta es porque hay cosas detrás de la misma… trato de aprovechar mucho el espacio. El cuarto trae una nevera y aire acondicionado. El uso del primer artefacto cualquiera lo entiende, pero el aire-acondicionado estuvo extremadamente difícil de entender. En teoría cuando uno coloca "22°C" el aire acondicionado debería arreglárselas para que esa sea la temperatura del cuarto o para que esa sea la temperatura del aire que echa. No hay otra. Por más que me esforcé los primeros intentos de aire caliente a incluso "28°C" fueron infructuosos. ¡Ah! claro, es que ese era el modo de frío, si lo pongo en modo caliente entonces incluso 24°C sí es caliente… No tiene sentido. Shock cultural, shock científico. 24°C es 24°C, no hay 24°C fríos y 24°C calientes !!! Aun no sé porqué es así, pero ya no importa, puedo poner mi cuarto a la temperatura que desee, fría o caliente.



    Mi sitio de estudio. La habitación no incluía corcho, pero si calendario y un muy ajustado closet.





    Ahora bien, una de las áreas vitales de la residencia es pública: el baño. La noche antes de subir estas fotos me acordé que había prometido fotos de las pocetas, todos quieren ver que las pocetas de aquí no son las letrinas de antaño. Tomé mi cámara a eso de la media noche, y lo más sigilosamente posible me acerca con la misma al baño, con cara de que no pasa nada. Realmente no quería que nadie me viera entrando al baño con un cámara fotográfica, sería muy bizarro.

    Pero antes, la ducha. Otro sitio más que no es generoso en espacio. La forma del piso debe dar una buena idea de lo estrecho que se está al tomar una ducha.




    Los lavamanos también son públicos, y no están dentro del baño sino en el pasillo. Si alguien entiende la razón práctica de esta decisión que deje un comentario. La primera vez que uno utiliza los lavamanos le queda la buena impresión del avance tecnológico: "pero si la llave se abre y se cierra automáticamente, qué bueno", pero no. No hay una llave física, solamente el sensor automático. Como no hay llava no hay manera de decidir la temperatura del agua. Siempre empieza fría y se ve calentando a medida que la usas. Terrible para cepillarse, terminas enjuagándote con agua muy caliente. Además, el sensor no está dispuesto de forma ergonómica: normalmente uno acerca las manos al grifo en diagonal, las manos se cruzan debajo del grifo de modo que poder lavar una a la otra. Pero el sensor esta colocado de modo que las manos tienen que acercarse perpendicularmente al grifo, incomodísimo, tienes que meter los codos hacia la barriga para poder lavarte.

    Adicionalmente al problema del grifo está el espejo. Parece colocado para usuarios con una estatura promedio bastante más baja. Tengo que agacharme para poder verme en el espejo. Terrible.

    Ahora sí que sí, que las disfruten: las pocetas con calentadores de asiento.





    Como la vez pasada, pueden encontrar más fotos en:
    http://picasaweb.google.com/O.Simon/Residencia

    lunes, mayo 07, 2007

    Ciudad-Capital

    Kyôto, una traducción literal podría ser Cuidad Capital. Fue de hecho la capital de Japón hasta que en 1868 la restauración Meiji movió la capital a Edo, actual Tôkyô (Capital Oriental). Kyôto es una ciudad llena de historia y cultura, templos, tradición, etc.

    El día sábado, luego de un corto viaje de 1 hora en tren, llegué a tan maravillosa ciudad. Éramos alrededor de 9 extranjeros y 5 estudiantes japoneses quienes tuvieron la bondad de hacer de guías sin ninguna recompensa a cambio. Esta vez sí tuve cámara, tal vez los detalles de la misma los deje para una historia futura. ¡Tengo fotos! ¡Yatta! (lo logré).



    Vista de Kyôto a la salida de la estación del tren. Las calles de Kyôto no son más grandes que la que se ve aquí. Kyôto fue diseñada siguiendo patrones chinos de la época, todas las calles son rectas y se cruzan formando una gran cuadrícula.



    Nuestro primer objetivo era subir la montaña Dai-monji (lit. Palabra "Grande"). En un costado de la misma cada año el día 16 de agosto en la noche prenden en fuego el caracter chino para "grande": Esta tradición data de al menos 1200 años. En aquellos tiempos, ciertos monjes realizaban esta hoguera para procurarse salud, se escogió el caracter "Dai" ya que una de sus interpretaciones es cuerpo.



    Como este fin de semana venía de ser un fin de semana largo unas pocas personas tuvieron la misma idea que nosotros, y eso es un pequeño problema en un país tan populoso como éste. Esta era parte de la vía que debíamos recorrer para llegar a la falda de Daimonji. Realmente que en el ambiente había mucha energía, y todo rodeado por tienditas muy pintorescas:



    Luego de una subida nada amable para mis piernas de ciclista-principiante logramos llegar a la palabra Dai. La vista de la ciudad es genial, pero en ese día en particular el cielo no estaba muy despejado.



    La palabra Dai la forman colocando fogatas en pebeteros. Esta es la pata derecha de Dai:



    Arriba almorzamos en modo picnic. En todo picnic estilo lejano oriente nunca faltan los onigiri. Son bolas de arroz rellenas a gusto del consumidor (en mi caso, salmón) y cubiertas de alga comestible que sirve a la vez de envoltura del alimento:



    Nota para mi mamá: no te preocupes, no me comí solamente eso.

    Yuka-san, una de nuestras guías, muy simpática. El japonés medio cortado es Kazuya, otro guía, el catire es un becario europeo, sin duda.



    Luego de descansar regresamos a la ciudad y caminamos hasta el "Gin-kaku-ji", o "Templo del Pabellón de Plata". Originalmente fue construído como una villa para el descanso y retiro del Shogun del momento. Luego de la muerte del dueño se empezó a utilizar como templo budista. Este era el deseo del Shogun. El edificio principal no está cubierto en plata como debería ser debido a que la economía del momento de la construcción no favorecía muchos lujos. Aquí hay algunas fotos interesantes del pabellón, edificios y jardines adyacentes:





    Pude probar un dulce japonés típico de esta época del año: dango. Es un pincho con 3 bolitas de masa de arroz, una es de sabor cereza, una de arroz solo y la última de té verde. Aquellos fan del animé recordarán a Soujiro Zeta comiendo este dulce en Rurouni Kenshin. ¡Es realmente excelente! Podría ir de nuevo a Kyôto solamente para comer más dango.

    Nuestra última parada: "Kin-kaku-ji", o "Templo del Pabellón de Oro". La historia es muy similar a la del Gin-kaku-ji, excepto porque el Kin-kaku-ji fue primero, se realizó en una época de opulencia y está realmente cubierto de puro oro.




    De nuevo hay más jardines. En el lago hay peces Koi. Es un pez muy apreciado por la cultura japonesa, es considerado muy hermoso, algunos ejemplares pueden realmente costar una fortuna.




    Más adelante hay un templo shintoista donde, entre otras actividades, las personas atan sus deseos en una tablillas con la esperanza de verlos cumplidos, o donde hacen sonar un gran gong para llamar la atención del dios del templo y que así escuche su plegaria. El dios de este templo es el dios del fuego.




    Luego del Kin-kaku-ji nos regresamos en tren a Ôsaka. No sé cómo lo logré, pero me quedé dormido en el tren, y justo en la estación que me tocaba me desperté lo suficiente para escuchar que era la estación de Awaji. Logré hacer un viaje en tren modo japonés, es decir, quedarse dormirdo y despertarse en la estación en la que a uno lo toca. Creo que algunos de los poderes japoneses ya se me están pegando.

    El resto de las fotos las pueden encontrar en: http://picasaweb.google.com/O.Simon/Kyoto